EMPATÍA: la capacidad de ponerse en el lugar del otro

Caso Wilde

El 07 de Mayo, en la Sala V del Tribunal de Juicio de la Ciudad de Salta, tras una extensa audiencia de debate en la causa seguida contra Franco Nicolás Wilde, acusado por abuso sexual, lo condenaron a la pena de seis años de prisión efectiva, luego de ya haber cumplido dos años y medio de prisión domiciliaria.

El hecho denunciado habría ocurrido en una fiesta privada organizada en el predio Gauchos de Güemes, el 1 de enero de 2019.

La familia de Franco, creyó que ese día era el día de la verdad, era el día del fin del martirio que les había tocado vivir, pero muy por el contrario, entre la impotencia, el dolor y la bronca, tuvieron que juntar los pedacitos rotos y continuar con la batalla.

Me imagino a ésta familia dando los primeros pasos para ingresar a ver a su hijo en la Alcaldía, sacando fuerzas de dónde no hay para dar cada paso y no desvanecer en el intento, tratando de ocultar el dolor para no preocupar a su hijo, fingiendo tranquilidad para dar tranquilidad a éste joven.

ÉSTO NO SÓLO ES UNA MALA EXPERIENCIA, SINO UNA LECCIÓN DE VIDA, tanto para Franco, que es quien está privado de su libertad, como para su familia, amigos y allegados, pero también debe serlo para quienes denunciaron ésta enorme mentira.

Ésta lección de vida debe haber unido más que nunca a la familia Wilde, turnarse entre papá, mamá, hermana, abogado y hasta otro tío los domingos para cubrir la soledad de Franco. Ésta lección de vida les debe haber enseñado que son mucho más fuerte de lo que se imaginaron, que los detalles del día a día son los que verdaderamente importan, que las sonrisas, los llantos y los abrazos tienen otro sabor cuando se dan en casa…

Ésta lección de vida debe mostrarles día a día que es real la frase que tanto se repite: LA ESPERANZA ES LO ÚLTIMO QUE SE PIERDE! Que lo único real al fin y al cabo no es lo que se vé, sino lo que se siente, que la Fé en Dios puede mantenernos en pie…

Una lección de vida que a cualquier persona que se haya interiorizado un poquito en el tema, no puede NO sentir EMPATÍA con ellos, esa capacidad de ponerse en el lugar del otro es lo que hoy por hoy los hace mantenerse en su lucha…

El miércoles 28 de Julio marchan nuevamente y no sólo por su hijo, porque sin querer están llevando una batalla enorme en sus hombros, la de pelear contra un Sistema Judicial deshonroso, y eso nos sirve a todos. Quiero EMPATÍA! Convirtamos ésta marcha en algo enorme para nosotros como sociedad y digamos BASTA A LAS INJUSTICIAS!!!