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MANIFESTACIONES

¿SÍ O NO?

MANIFESTACIÓN: es la posibilidad de toda persona para poder manifestarse en los espacios públicos como calles o avenidas, sea que lo haga en grupo o de manera individual, con el propósito de expresar algún reclamo a las autoridades o externar un momento de júbilo. Muchas personas se manifestaron y cortaron calles cuando ganó Argentina, o River o Boca, pero pareciera que eso no molesta a nadie. Pero no así, cuando se trata de docentes, camioneros, feministas o pedidos de Justicia.-

Es raro el día en que no encontremos en el periódico la noticia de alguna manifestación pública, esto es, personas que están reclamando o protestando porque el gobierno tomó una medida que considera que les afecta. Pero como se equilibra esa manifestación sin que nadie se sienta atacado en su moral, sin afectar a los derechos de terceros, o sin que parezca que provocan algún delito, o perturbe el orden público. SIEMPRE FUE DIFÍCIL CONSENSUAR CON TODOS.

La realidad es que en los países con instituciones que funcionan bien hay más tendencia a participar a través de foros institucionalizados, mientras que en los países con instituciones menos eficaces se utilizan mecanismos de participación directa tales como las protestas callejeras. LO CUAL QUEDA COMPLETAMENTE DEMOSTRADO EN NUESTRO PAÍS, CON LA CANTIDAD DE MARCHAS QUE SE REALIZAN A DIARIO, QUE NUESTRAS INSTITUCIONES NO SON EFICACES.

Por otro lado, varios teóricos consideran que para generar manifestaciones se tiene que dar una combinación de dos factores: insatisfacción con el sistema político y la alienación. Es por eso, que la mayoría de las manifestaciones se dan dentro de minorías, personas de un nivel socioeconómico más bajo o grupos oprimidos. No obstante, otros teóricos como Albert Bandura y Richard Walters, consideran que independientemente de la frustración, la creencia de que estas conductas son efectivas refuerza el ímpetu de la población por repetirlas constantemente, sobre todo, si las personas que realizan dichos movimientos pueden generar un sentimiento de identidad y pertenencia.

La marcha docente es el ejemplo más claro de éstos días, muchos que NO SON DOCENTES se quejan por los cortes, se quejan porque sus hijos no tienen clases, se quejan porque piden un salario mayor cuando tienen más tiempo de vacaciones que otros trabajadores, se quejan porque trabajan menos horas que cualquier otro trabajador de oficina, se quejan porque creen que los docentes cobran bien, se quejan, se quejan y se siguen quejando…

Los docentes piden por un incremento salarial escalonado del 25% para lo que resta del año. Y que la distribución sería de un 5% en julio y 5% septiembre, un 10% en octubre y un 5% en diciembre. Además, piden un bono de $10 mil, a pagarse con el sueldo de agosto.

A todo ésto se suma la reapertura de la Paritaria Nacional Docente, en cuya instancia los gremios rechazaron la primera oferta salarial del gobierno nacional por considerarla «insuficiente».

MANIFESTACIONES ¿SÍ O NO?

 

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