Todos los caminos conducen a Balcarce 50, los audios dejaron de importar por la gravedad de los elementos hallados

Ya no importa si los audios fueron editados, ya ni siquiera estos son la prueba más importante en la investigación que lleva adelante la justicia en el marco de supuestas irregularidades en la compra de medicamentos a través de la Agencia Nacional de Discapacidad.

La realidad es que a pesar de que puntuales personajes de la política oficialista quisieron bajar la ebullición al tema, los elementos que complican al ex titular de ANDIS, Diego Spagnuolo, se apilan de estrepitosamente.

Hay conversaciones extraídas de los celulares peritados, hay videos, hay declaraciones, hay pruebas que demuestran hasta 1900% de sobreprecio en la compra de medicamentos. Hay de todo, ya no solo audios que no pocos pretendieron deslegitimar.

Los elementos probatorios contra Spagnuolo son realmente fuertes, porque se lo logra vincular con Miguel Ángel Calvete, un empresario que opera para los laboratorios y es señalado por el fiscal Eduardo Picardi como el encargado de manejar el dinero de las coimas.

Hay chats de la calvete con su pareja, Guadalupe Muñoz, que fueron borrados y recuperados en el que le pide “5 palos para el boludo del pelado”, que el fiscal entiende que se trata de Spagnuolo.

Hay a su vez audios de conversaciones que tuvo Calvete con una empleada que estaba bajo la órbita de Spagnuolo en la que se habla de pedir descuentos para la realización de pagos.

Lo más curioso, y es a donde apunta la justicia, es el destino del dinero, ya que esta empleada de ANDIS le informa a Calvete: “No se puede transferir a lo de Piero. Hay quilombo. No sé otro lugar”.

El vínculo Fred Machado

“Piero” no sería otro que Sergio Daniel Mastropietro, empresario de la aviación y socio del acusado por narcotráfico Fred Machado, aquel que financió la campaña de José Luis Espert y cuyo nexo terminó hundiendo al político.

Según el fiscal, el papel de Mastropietro era el de legitimar el dinero que salía de las coimas y se respalda en una serie de documentos que evidencian el vínculo financiero entre este y Calvete, siempre con la participación necesaria de Spagnuolo.

El 10 de septiembre pasado, Calvete le envió 5 archivos con transferencias realizadas a Baires Fly SA que totalizaron cientos de millones de pesos a Mastropietro, quien se encuentra vinculado a la firma mencionada.

Tras recibir ese dinero, Baires Fly transfirió a las droguerías beneficiadas por ANDIS los montos exactos recibidos, lo que Picardi entiende que se trata de movimientos compatibles con el lavado de dinero.

Los otros contactos

Más allá de las imágenes extraídas del video de una cámara de vigilancia en las que puede verse a Spagnuolo visitando a Calvete y los audios, hay otros datos que prometen profundizar esa relación.

Spagnuolo visitó a Mastropietro en su domicilio privado en Altos de Campo Grande en al menos dos ocasiones durante el 2025. En este punto es necesario no perder de vista la íntima cercanía de Espert con Spagnuolo y con Machado y de este último con Mastropietro.

En ambas visitas, casi simultáneamente aparecieron en Altos de Campo Grande el propio Calvete y su esposa, Guadalupe Ariana Muñoz, lo que sugiere que todos mantuvieron reuniones en conjunto.

Pero hay mas “casualidades” que llaman la atención de la trama y es que el dueño de Baires Fly es Luis Grande, ex piloto de la Gobernación de Rio Negro. Cabe destacar que en esa provincia estaba radicado Fred Machado, y que de allí se desprendió la diputada y senadora nacional electa con vínculos narcos Lorena Villaverde.

Los cuadernos de las coimas

Escritos con fechas, empresas, contactos y porcentajes de dinero se encontraron en el allanamiento realizado a la casa de Calvete, quien tenía todo minuciosamente detallado en cuadernos.

Estos fueron hallados el 9 de octubre pasado, y allí puede verse que Calvete funcionaba como nexo entre ANDIS y el sector privado farmaceutico. “Fue un verdadero articulador de una organización ilícita”, sostuvo Picardi.

Se encontraron incluso anotaciones de pagos a empresas como si se tratara de un funcionario de ANDIS a pesar de no haber sido designado ni cumplir ninguna funcion en el organismo.

De los mismos, junto con la revisión del celular de Daniel Garbellini, el ex subalterno de Diego Spagnuolo en la ANDIS, se estableció que las maniobras de sobreprecios y presuntos retornos involucraron unos 48.800 millones de pesos.

Los documentos comprometedores

Las auditorías y las investigaciones judiciales llevadas a cabo en la Agencia Nacional de Discapacidad lograron determinar una gran cantidad de sobreprecios en medicamentos, sobre todo en los de alto costo.

Hay, por ejemplo, siete medicamentos puntuales, entre ellos uno utilizado para el tratamiento de la leucemia, por los que se pagaban con un sobreprecio del 27%. pero las ventas por encima del valor de mercado llegaron a dispararse hasta el 2000% en ciertos casos.

Por estas horas, la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA) tiene en sus manos más de 600 contratos firmados entre la ANDIS y la droguería Suizo Argentina por un total de 37 mil millones de pesos bajo la sospecha de sobreprecios y direccionamiento.

¿Y Milei y los Menem?

El primer indicio de la participación de la secretaria General de Presidencia Karina Milei y del subsecretario de Gestión Institucional de Presidencia Eduardo “Lule” Menem aparece por la filtración de los primeros audios.

La declaración judicial del ex asesor de comunicación de La Libertad Avanza Fernándo Cerimedo fue un aporte clave en este sentido ya que reveló que lo que se escucha en los audios ya se lo había contado Spagnuolo en reuniones informales.

Cerimedo allí sostiene que el ex titular de ANDIS le había mencionado directamente a Karina Milei y a Lule Menem y su relato fue clave porque proporcionó un testimonio independiente que validó el contenido de los audios grabados de forma clandestina, los cuales la defensa de los imputados intentaba anular como prueba. 

No pasó de largo tampoco el sugestivo silencio de los señalados como así también la intención de bajar de la mesa de toma de decisiones a Lule Menem tras conocerse los hechos, una suerte de intento de esconderse ante tamaña revelación.