Tedeum del 25 de Mayo: Milei le negó el saludo a Macri, a Villarruel y se enfrentó a un fuerte mensaje de la Iglesia
Javier Milei y Victoria Villarruel volvieron a compartir un acto oficial tras dos meses sin aparecer juntos en público. Si bien en la previa se habían tejido un sinfín de especulaciones sobre la relación entre el presidente de la Nación y su vice, bastaron un par de minutos para reflejar lo que se sabe desde hace tiempo: el vínculo está roto.
Tras arribar a la Catedral Metropolitana junto a los miembros de su gabinete y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, el mandatario decidió no saludar a la vicepresidenta. Lo mismo hizo con el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, a quien le negó el saludo cuando una de las principales figuras del PRO se acercó al líder libertario.
Las diferencias con lo ocurrido el año pasado son notorias. Es que el presidente y su vice llegaron por separado para participar de la celebración. Tampoco hubo caminata conjunta desde la Casa Rosada hasta la Catedral, tal como ocurrió en 2024. En esta ocasión, Milei eligió arribar con sus ministros y Villarruel llegó por su cuenta.
La ceremonia religiosa, que comenzó a las 9 de la mañana y fue la primera desde el fallecimiento del papa Francisco volvió a reflejar la frialdad entre Milei y Villarruel, aunque no sorprendió a nadie. En la previa, tanto desde Casa Rosada como desde el entorno de la vicepresidenta habían admitido que el vínculo entre ambos atraviesa un desgaste evidente.
Las diferencias entre Javier Milei y Villarruel llevan más de un año y a medida que pasa el tiempo se agiganta cada vez más. Igualmente, en el Gobierno nacional le quitan dramatismo. Aclaran que “eso no afecta la gestión presidencial”.
El fuerte mensaje de García Cuerva
Por su parte, el arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, cuestionó con dureza el clima de agresión, desprecio y violencia verbal que (según expresó) atraviesa a la sociedad argentina. “Hay quienes se burlan de Jesús”, advirtió en su homilía, y agregó que “son los haters de aquella época, los que difaman, desprecian o critican destructivamente a una persona, entidad u obra”.
Sin mencionar explícitamente al Gobierno ni a actores políticos puntuales, García Cuerva habló de un “terrorismo de las redes”, en línea con expresiones similares del papa Francisco. “Hemos pasado todos los límites: la descalificación, el destrato y la difamación parecen moneda corriente”, señaló, en lo que fue interpretado por muchos como una advertencia sobre el nivel de violencia simbólica que atraviesa la vida pública argentina.
Izamiento de la bandera
A las 8:15 horas, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Jorge Macri, participó en el tradicional acto de izamiento de la bandera nacional.
Si bien las autoridades habían informado que la conmemoración comenzaría a las 8:30 horas, el acto se adelantó un cuarto de hora. En ese contexto, hay expectativa por el arribo del presidente Javier Milei a la Catedral Metropolitana.
Tras participar del acto, Jorge Macri se refirió a la importancia del 25 de Mayo y destacó que es un momento que permite reflexionar sobre la necesidad de trabajar para “reconstruir la Patria que cada argentino necesita”.
Y agregó: “Las fechas patrias permiten darle un sentido a todo lo que hacemos”. En este sentido, se refirió a la expectativa por el discurso del arzobispo Jorge García Cuerva, al afirmar que “siempre es muy importante escuchar a la iglesia”.
