QUITE DE COLABORACIÓN DE EMPLEADOS DE AGUAS DEL NORTE

Estado de alerta permanente del SINDICATO ÙNICO DE TRABAJADORES DE OBRAS SANITARIS SALTA

Pedro H. Cruz Romero, secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de Obras Sanitarias Salta (SUTOSS), y Director Obrero de Aguas del Norte, confirmó el inicio de quite de colaboración y estado de alerta permanente. Bajo el lema «LOS TRABAJADORES SANITARISTAS SON ESENCIALES» advirtió que si no reciben respuestas habrá un paro total del servicio.

El sindicalista explicó que esta acción es el resultado ante la falta de respuesta positiva a sus reclamos por la falta de ingreso a hijos de jubilados y fallecidos, mejoras edilicias, movilidades de trabajo, chulengos, desmalezadoras, motobombas, martillos percutores, herramientas y repuestos básicos para dar soluciones a los constantes reclamos del servicio, como así también la falta de uniformes operativos, elementos de protección personal, útiles administrativos, herramientas de trabajo, equipos electrónicos como computadoras, servidores de sistemas, celulares de trabajos , mobiliarios de oficinas y tantas otras falencias, como el exceso de ingreso de personal escogido a dedo y con niveles y categorías que no corresponden.

Hoy miércoles 11 de octubre, el quite de colaboración fue solo de dos horas, de 9.30 a 11.30, esperando una pronta respuesta del Gobernador Gustavo Sáenz, caso contrario endurecerán las medidas con un paro total de actividades.

«No exigimos nada que no nos corresponda siendo trabajadores esenciales.»

Hace un poco más de dos meses, Pedro H. Cruz Romero era anunciado como director Obrero de la Empresa Aguas del Norte, pero nunca fue convocado a votar por ninguna decisión que tomara el Directorio de la Compañía, es decir que hasta la fecha no pudo hacer uso de la representación que ese cargo le otorga a favor de los trabajadores, lo que demuestra la falta de interés de una empresa que debería priorizar su recurso humano.

Como usuario del servicio de agua potable y cloacas, preocupa el estado del mismo, que bajo ningún aspecto es el óptimo, pero también hay que aceptar y reconocer que el agua no llega por arte de magia a nuestros hogares, son éstas personas, las que se ven en las fotografías, quienes hacen lo posible día a día, para que la vecina tenga para lavar sus verduras, para que sus hijos puedan bañarse, para que la abuela lave la ropa, para que papá lave su auto, para que la prima tome agua y todo lo que implica usar el agua y las cloacas. La  falta de desinversión no es culpa de los empleados, y sin embargos son ellos los que dan la cara ante el enojo de la sociedad.

Imagínense trabajar de albañil en una obra donde el dueño les exige construir una habitación pero sin comprar el material necesario, o si fueras secretaria de un médico que te exige llevarle la agenda pero no te da donde anotar, ni un teléfono para recibir las llamadas de los pacientes, o si te toca limpiar una casa pero no te dan ni una escoba… esa es la realidad de estos trabajadores, ni siquiera tienen los elementos de seguridad necesarios para protegerse cuando trabajan con elementos como el cloro o la materia fecal.

Como lo dijo Pedro H. Cruz en la conferencia de prensa: 

«¡LOS TRABAJADORES SANITARISTAS SON ESENCIALES Y LUCHAN POR UN TRABAJO DIGNO!»