Néstor Soto confesó ser el autor del femicidio de Catalina Gutiérrez
Soto llegó a los Tribunales de Córdoba esta mañana y salió 28 minutos después esposado, regresando a la cárcel de Bouwer. «Hizo una breve manifestación reconociendo su culpabilidad», explicó el abogado a medios locales, añadiendo que no pudieron acceder a toda la abundante evidencia presentada.
El joven, oriundo de Bariloche, «realizó una confesión breve y está muy arrepentido», indicó Schönfeld. Dos semanas atrás, tras el hallazgo del cuerpo de Catalina, Soto había admitido el asesinato ante la policía. «Ahora comenzaremos a analizar el resto de la prueba para contextualizar su declaración», dijo el abogado.
Soto, acusado de homicidio calificado por alevosía y por mediar violencia de género, se negó a someterse a pericias psiquiátricas y psicológicas por consejo legal.
Catalina vivía con su familia en el barrio Inaudi y la noche del 17 de junio salió de casa en un Renault Clío de sus padres, solicitado por ella para ir al Patio Olmos Shopping. Sin embargo, dejó de responder mensajes antes de llegar a la reunión con amigas, ya que se encontró con Soto, su compañero de la facultad de Arquitectura.
Horas después, su cadáver fue hallado parcialmente quemado en el asiento trasero del Renault, abandonado en un descampado en la calle Pedro Echagüe 3900, en el barrio Ampliación Kennedy. Posteriormente, Soto confesó a la policía que había cometido el crimen, lo que ratificó ante la Justicia.
Los videos de las cámaras de seguridad mostraron a Soto conduciendo el Renault Clío desde su casa hasta el lugar del crimen. Los investigadores sospechan que Catalina estaba en el asiento trasero, aunque aún se debe determinar si estaba inconsciente o ya asesinada. Los primeros informes de la autopsia revelan que, una vez en el descampado, Soto intentó prender fuego al auto.
