Motociclistas atropellados por Juan Igancio Buzali. La defensa solicitó la detención inmediata.
«Atento al comportamiento desplegado por Juan Ignacio Buzali en el acontecer de los hechos, quedó demostrado su desprecio total por el derecho, poniéndose en fuga luego de atropellar a las víctimas, esto constituye un peligro cierto de fuga», señaló el letrado Martín De Vargas en su presentación, a la que tuvo acceso Télam.
«Dada la existencia de esos peligros procesales, para asegurar la finalidad del proceso penal» De Vargas solicitó al juez de garantías «que pida la detención de Buzali».
Paralelamente, el letrado presentó un escrito en el que solicitó el apartamiento de la jueza interviniente en la causa, Marcela Garmendia -titular del Juzgado N° 5 de la capital bonaerense-, ya que su hijo, Juan Manuel Martínez Garmendia, integra el Gabinete municipal de Julio Garro, al igual que Carolina Píparo y que Darío Ganduglia, y se debe evitar la pérdida del «carácter objetivo e imparcial del juzgador».
Según lo que aseguró públicamente Píparo, el hecho ocurrió cerca de las 2 de la madrugada de Año Nuevo, cuando fue asaltada por seis «motochorros» que la interceptaron en momentos en que llevaba a su padre a su casa y le robaron la cartelera con 20 mil pesos y su teléfono iPhone.
La legisladora bonaerense agregó que tras ello y cuando se dirigía con su esposo a realizar la denuncia en una comisaría a bordo de su auto Fiat 500L, volvieron a ser interceptados por los «motochorros» y en ese momento embistieron una de las motos para escapar.
El abogado de los jóvenes embestidos dijo al respecto que «la moto quedó enganchada debajo del auto de Píparo, venía tirando chispas cuatro cuadras y la gente les pedía que paren».
Según el letrado, finalmente Píparo y su marido detuvieron la marcha en Plaza Moreno «donde los estaba esperando el secretario de Seguridad Municipal, Darío Ganduglia, que justamente es quien maneja todas las cámaras del municipio».
En ese sentido, el letrado destacó sus sospechas de que Darío Ganduglia, el secretario de Seguridad municipal, puede haber evitado «que se hagan los controles de alcoholemia de rigor», y que «lamentablemente la extracción de sangre fue más de treinta horas después del hecho, por lo que si había alcohol, tuvieron más de un día para tomar diuréticos y eliminarlo».
«Como funcionario de la Municipalidad de La Plata, ante una situación ilícita y ante un posible accidente de tránsito, tiene que hacer una toma de dosaje de alcohol, y el municipio tiene los aparatos y medios técnicos para hacerlo», agregó.
De Vargas también apuntó contra el funcionario ya que «es el que comanda la Policía local, las cámaras de seguridad, y es el que tiene a cargo todo un área importantísima, donde están las pruebas de lo que pasó», por lo que durante las últimas horas solicitó a la Justicia «la preservación de la cadena de custodia de la muestra de sangre extraída a Buzali, y que se extienda la pericia a drogas y psicofármacos».
«Ya pedí que se secuestren y periten los teléfonos, que se intime a las compañías telefónicas a que entreguen las listas de llamadas entrantes y salientes de los abonados correspondientes a Píparo, a Buzali y a Ganduglia, y es importantísimo, porque nos va a mostrar el entramado de por qué esta persona aparece en ese lugar, esperándolos para recibirlos y protegerlos», explicó.
Por eso, el abogado consideró que su defendido se halla en «una situación de indefensión» que se agrava porque el hijo de la jueza que entiende en la causa, Marcela Garmendia -titular del Juzgado 5 de la capital bonaerense-, es «un chico que está siendo investigado por la Justicia por tráfico de influencias».
«Queremos que se aparte a la jueza y que intervenga otro para garantizar la imparcialidad, todo esto puede tender al ocultamiento, a la desviación, ya vimos videos editados que fueron manipulados para hacer creer a la opinión pública que los estaban persiguiendo cuando en realidad con el análisis nos dimos cuenta que son montajes de videos cortados, en ningún momento se ve una continuidad», concluyó.