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El Espacio “Cabildo Abierto” y la Parábola del Sembrador.

Política. La militancia que resiste y se reagrupa. En la búsqueda de lograr nuevos espacios de pensamiento.

Una analogía literaria de proyección espiritual quizás sirva para explicar el intento de formar una nueva columna de militancia cívica preocupada en elaborar un pensamiento político diferente.

SALTA-POR ERNESTO BISCEGLIA.-

La Escritura de hoy domingo (Mateo 13,1-23)- propone la meditación sobre la Parábola del Sembrador, y en un atrevimiento dialéctico me permitiré  realizar una atrevida analogía del sentido místico de la enseñanza con el objetivo teleológico de este Espacio que dimos en llamar “Cabildo Abierto para las ideas, el diálogo y el desarrollo de la opinión.

En primer lugar, hay que decirlo, “Cabildo Abierto” es una reunión de personas honorables, todas que pueden acreditar Curriculum Vitae o Cursus Honorum, pero ninguna prontuario, lo cual ya de suyo hace una diferencia fundamental en el espectro político y social.

Luego, y yendo a la cuestión de la parábola, no hay que ver en “Cabildo Abierto” un grupo de genios de la botella –aunque algunos gustemos de degustar de cuando en vez alguna libación-, sino personas preocupadas con la situación social y comprometidas con sembrar para un futuro mejor. Es decir, no nos situamos tanto en el presente sino tanto más en el futuro.

Frente a los que critican denostando esta reunión y pensándola como una suerte de “complicidad” con el gobierno actual, a los que creen que esto es “más de lo mismo” y sobre todo a los agnósticos y escépticos que piensan que nada vamos a cambiar, les decimos: quizás no podamos cambiar nada, pero a diferencia de todos ellos, lo habremos intentado.

Y la Escritura dice que al final: “Descansan en paz porque sus obras los acompañan” (Ap. 14-13)

Decimos que “Cabildo Abierto” es la parábola del “alegre inicio”, porque no siembra el negligente ni el acomodaticio. Tampoco siembra el escéptico ni el necio ni el contestatario. Siembra el que tiene Esperanza, pues el agricultor echa la semilla sin saber qué ni cuánto le devolverá la tierra. Aún más, sin saber si le devolverá porque está sometido a las suertes de los tiempos.

El que siembra percibe, vislumbra posibilidades, nunca cuenta ganancias o se regodea en aplausos. En “Cabildo Abierto” sabemos de los malos hombres de gobierno, conocemos “la tela del paño”, somos conscientes de las mezquindades que anidan en los despachos, palpamos la mediocridad de los que se niegan a las reformas. Pero tenemos Esperanza.

Y en 1Pedro 3-15, se nos enseña: “A dar razón de vuestra esperanza a cualquiera que os pida explicaciones…”

Por eso, cuando los que permanecen estáticos, parados a la vera del camino viéndonos marchar nos pregunten: ¿Y, Ustedes, qué están haciendo? A esos, les responderemos: “Vamos caminando la Esperanza”.

Decimos que “Cabildo Abierto” es la parábola del “alegre inicio”, porque no siembra el negligente ni el acomodaticio. Tampoco siembra el escéptico ni el necio ni el contestatario. Siembra el que tiene Esperanza, pues el agricultor echa la semilla sin saber qué ni cuánto le devolverá la tierra. Aún más, sin saber si le devolverá porque está sometido a las suertes de los tiempos.

Formar en “Cabildo Abierto” es un acto de generosidad porque no existe contraprestación alguna a cambio, se dona el más valioso de los bienes, el tiempo, a cambio de la satisfacción de haber salido a la palestra a decirle al gobierno del Dr. Gustavo Sáenz aquello que no está bien, aquello que está –según nuestro criterio- faltándole, pero también a decirle “Aquí traemos nuestra contribución”. No vemos que esta sea una actitud muy generalizada.

No nos reúne la obsecuencia sino la fortaleza cívica y la trayectoria transparente que nos permite sentarnos frente al gobernador, sus delegados o sus ministros y decirles “Usted se está equivocando en esto” o “Pensamos que mejor sería esto otro”, y también “Venimos a contribuir con esto”.

No traemos soluciones envasadas al vacío sino propuestas alternativas. No venimos a hacer oposición porque esa es una tarea muy fácil. Son opositores “per se” todos los mediocres que no pueden hacer otra cosa mejor que criticar.

En “Cabildo Abierto” NO estamos de acuerdo con muchas de las políticas ensayadas hasta ahora, pero venimos a sumar conciencias en un tiempo crítico, donde la IDEA para pensar la Salta de la pospandemia es más valiosa que la militancia boba de la mayoría.

Allá va la legión de los genuflexos que piensa que se sigue haciendo política sólo publicando su foto al lado del gobernador. Esos, no entienden la nueva política.

Hoy, ser obsecuente con un gobierno es ser un individuo peligroso.

En suma, “Cabildo Abierto” no es un laboratorio de ensayo partidario ni un trampolín electoral, tampoco una bolsa de desempleo. No aspiramos a que el éxito recompense nuestro intento. En este Espacio el éxito ya está logrado, “la cosecha ya está comprendida en la siembra”, dice el Padre Juan José Núñez o.f.m., y agrega: “la cosecha es la acción de sembrar”.

La Parábola del Sembrador enseña finalmente que la semilla que se pierde es la que nunca se ha sembrado. El hombre que pierde es el que nunca fue capaz de tener la actitud generosa de abrir su mano para echar la semilla en tierra.

En “Cabildo Abierto” lo que vale es la actitud. Y ésa es la diferencia.

¿Qué más decir? Sólo rubricar con aquellas palabras del Apocalipsis (3,22) “El que pueda entender, que entienda”

Para que vean que hasta en el Apocalipsis se puede hallar Esperanza.

Fuente: http://ernestobisceglia.com/

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