Aire fresco para el gabinete de Sáenz. Camila Evita Morales podría sumarse al equipo del gobernador
Crece el rumor: Camila Evita Morales podría sumarse al equipo del gobernador como parte de una renovación en la gestión
En los pasillos de la política salteña empezó a circular con fuerza el nombre de Camila Evita Morales como posible incorporación al equipo del gobernador. Morales es reconocida por su formación en recursos humanos, su experiencia territorial y su presencia en la militancia joven. Su llegada sería leída como un gesto de renovación dentro de la estructura provincial.
Distintas fuentes cercanas al Ejecutivo provincial señalaron que el gobernador evalúa sumar nuevos perfiles a su equipo para fortalecer áreas estratégicas de cara al próximo año.
Dentro de esos nombres aparece el de Camila Evita Morales, una dirigente joven que se ha preparado académicamente en materia de gestión y recursos humanos, acumulando además una importante experiencia en territorio.
Morales viene trabajando hace años en espacios de militancia y participación comunitaria, donde se destaca por su capacidad de organización, manejo de equipos y diálogo con diferentes sectores sociales.
Recién después de ese recorrido consolidado se transformó en una referente visible dentro de la Juventud Peronista, aunque siempre con un perfil más ligado a la gestión que a la rosca interna.
En varias oportunidades expresó críticas a la intervención del PJ en Salta, calificándola como arbitraria y señalando que permitió el ingreso de oportunistas que se alejaron de la esencia militante del peronismo territorial.
Respecto del Gobierno provincial, Morales ha subrayado que el gobernador “es el gobernador de todos los salteños”, destacando que conduce un proyecto claro, con objetivos definidos e inclusivos, que requiere nuevas miradas y cuadros formados para afrontar los desafíos actuales.
Si finalmente se concreta su desembarco en la gestión, sería visto como un movimiento político orientado a renovar la estructura, incorporar perfiles jóvenes con formación técnica y romper con la lógica tradicional que ha dominado la política salteña durante años.
Una apuesta — dicen algunos — a oxigenar el gabinete con figuras nuevas que aporten gestión, presencia territorial y una visión moderna del Estado.
